jueves, 5 de noviembre de 2009

Preguntas

La nueva ley de educación secundaria plantea muchos interrogantes.
En primer lugar ¿cual es la partida presupuestaria destinada a educación?.¿Como se logrará la concentración horaria en los docentes que tienen horas distribuidas en mas de una escuela?.En la práctica,¿como lograr la capacitación docente para generar conocimientos verdaderamente significativos en poblaciones tan variadas como las que se tiene previsto contener?.¿Que efectos laborales podemos esperar a partir de una readecuación de las asignaturas? y así muchas mas.
Esto nos coloca de frente a la problemática socio-histórica que poseemos y su choque frontal con una institución que ha sufrido el golpe brutal de las constantes crisis a las que hemos estado sometidos.Si bien la escuela es un elemento vital para avanzar en el achicamiento de las brechas sociales, podemos afirmar que los gobiernos poco han hecho para prepararla para esto.Mas bien nos enfrentamos al increíble razonamiento de algunas ideologías que están haciendo todo lo posible para destruir la escuela pública y de esta manera conformar grandes bloques de negocios a partir d e la educación privada.Sin menospreciar a esta última en algunos casos en cuanto a sus esfuerzos por lograr calidad educativa,sabemos por demás que no es una solución viable para enfrentar los problemas de las clases menos favorecidas ,que en este país es amplia y está en franco crecimiento.
Volviendo al tema de la ley podemos decir que se reabre las esperanzas de un auténtico cambio pero depende esto si responde solo a intenciones netamente electoralistas como siempre a ocurrido o a un plan estratégico que tenga visión sino de largo al menos de mediano plazo.Me quedan algunos interrogantes.¿No hubiera sido preferible comenzar el cambio con una reforma desde los primeros años de edad?.¿Que sucederá en la praxis con la articulación con la Universidad?.¿El próximo gobierno sino es de este signo político querrá empezar desde cero nuevamente como es costumbre?.
Si hay algo que nos invade por todas partes son las preguntas, quizás sea el momento en que la humanidad deba comenzar a buscar verdaderas respuestas.

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